martes, 23 de octubre de 2012

UN MISTERIO MÁS

Abro el volumen que aspiró a guardar mis horas mejores y siento de nuevo, acrecida, la extrañeza ante mis versos, que me parecen escritos en una lengua ajena que sólo pudiera comprender superficialmente. Escojo los poemas que leeré y los recito en voz alta. Ni rastro de la emoción que los convocara, como un paisaje visto a través de un velo de niebla. Igual desconcierto y perplejidad nos causan las cosas de la vida que no nos ha sido dado comprender, por más que metafisiqueemos sobre ellas con bienintencionada filosofía de baratillo. Los poemas, que expresaron nuestra verdad más pura, aun hecha de preguntas, se han convertido en un misterio más. Sería su destino.

2 comentarios:

  1. Se te alejan los poemas, como lo demás, y los reemplaza la extrañeza (¿poética?) de su alejamiento.

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  2. Si Einstein tenía razón, "el misterio es la cosa más bonita que podemos experimentar, es la fuente de todo arte y ciencia verdaderos". Quizá ese misterio en el que se han convertido los viejos poemas forme parte de la fuente que hará surgir los nuevos. Ojalá.

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